Había una vez en un pueblo llamado patio bonito (nada de bonito y nada parecido a un patio) en ese hermoso pueblo, vivía una familia muy feliz y eran los Morgan, estaba conformada por tres niños y dos adultos.Esta familia dependía de las cosechas de los mangos que eran cada seis meses y aparte de ellas otras frutas como mandarina y naranja, cuando iniciaba esta cosecha, ellos realizaban aquellas labores en el campo para recoger el producido y así poder vender la fruta, cuando no era época de cosecha aquellos padres trabajaban en otras labores del campo y sus hijos muy juiciosos estudiaban.En este sector agrícola no solo esta familia si no la gran mayoría vive de este producido.En honor a esta cosecha en el mes de enero los habitantes de este sector organizan un festival turístico y cultural en honor aquellos campesinos que día a día trabajan muy duro para obtener aquellos frutos que hacen conocer a nuestra región campesina.